Tu tímido mirar, muchas veces me marea,
con una sobredosis de sutil ternura,
me desbordas, me llenas, me perturbas con sana locura,
haciéndome en cierta manera, participe de lo que sea.
Me generas inquietud, buscando una respuesta
en la profunda suavidad de tus delicados ojos,
que destellan asombro en todas las facetas,
manifestándose en tibias líneas de azules maravillosos.
Me siembras paz cuando te veo,
pretendiendo en tus labios dar un paseo
Ya no soporto frenar mi deseo,
de acariciar tu alma,
si lo que siento, es lo que creo
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